Martyrdom 69 (Fake Branding & Marketing)
En la presente intervención artística un falso producto comercial es creado. Se concibe una pieza gráfica, un cartel para ser reproducido y divulgado masivamente en las calles de la ciudad de Bogotá. La paradoja está en que el producto promocionado, una banda de música, es inexistente y competirá con otros carteles que pretenden vender eventos de entretenimiento y productos comerciales reales.
Con esta intervención artística, el cartel Martyrdom 69 cuestiona el estado, y el deber ser, de las formas de expresión pop de la gráfica callejera desarrolladas por otros creadores visuales para Bogotá. Formas que a veces proponen una identidad estética post-colonial y otras veces, propenden por formas visuales en sintonía con un branding y marketing acorde con el mundo globalizado.
Adicionalmente, los carteles Martyrdom 69 se exhiben en espacios urbanos no convencionales –calles, muros, postes– facilitando al público su libre acceso sin la necesidad de asistir a galerías ni de comprar productos impresos. La presencia de los carteles en los muros de la ciudad es continua mientras no sean cubiertos, rasgados, arrancados, limpiados o se oxiden por la luz y la intemperie.
Este carácter efímero propicia juegos estéticos azarosos, gracias a la dinámica constante de los “pegoteros”; trabajadores que pegan, arrancan y sobreponen carteles, cuya acción favorece curiosos mosaicos de afiches forrando los muros y los postes, en donde pueden apreciarse collages coloridos, subtextos híbridos, tótems de la gráfica y hasta nuevos carteles a partir de fragmentos que decoran o contaminan el anti-paisaje urbano.
Finalmente, los transeúntes interesados en el falso producto o sensibles a la ilustración, buscarán la banda musical y serán conducidos a la presente página web.
Durante el mes de agosto y de septiembre del 2014, se pegarán tres mil trescientos (3 300) carteles en el Norte de la ciudad, sobre la Carrera 7a entre las calles 35 y 94.
Estas fotografías muestran algunos carteles que se encuentran en la ciudad de Bogotá, sobre la Carrera 7a entre las calles 35 y 70:
Cuando los diferentes carteles y otros anuncios callejeros quedan yuxtapuestos, se mezclan los diferentes mensajes y anuncios creando irónicos sub-textos híbridos:
Los carteles están constantemente expuestos a la intemperie y están sujetos a la manipulación de los transeúntes, haciéndolos muy vulnerables y efímeros:
Contrasta las diferentes formas de artes callejeros. Algunos expresan el sentir del pueblo y otros se conciben para promocionar productos al servicio del mercado:
Los “pegoteros” favorecen azarosas combinaciones que resultan en coloridos collages, al cubrir y yuxtaponer carteles:
Uno de los lugares más comunes para apreciar los carteles es en los postes de la ciudad. Ciertos Carteles, en especial los que ilustran personajes, al estar alineados unos sobre otros evocan “Totems” urbanos: